miércoles, 14 de julio de 2010

Una tarde a la vieja usanza


















De acuerdo a lo que me dictaban ciertas corazonadas, el regreso a mi ciudad estas vacaciones iba a ser una gran bandeja de nostalgias. No sólo porque no sé si retorne a esta ciudad en calidad de estudiante y con las vacaciones que me permiten cierta libertad, sino porque me había alejado mucho de ésta y del calor que emana del hotel Mamá. También influyó un poco el hecho de que haya decidido hacerme una cirugía de tabique nasal aquí, en la que todavía considero mi casa. Pero lo que más me conmovió de todo este paseo ha sido lo acontecido en la tarde de hoy, y es que luego de mucho tiempo me he vuelto a convertir en el televidente de videos musicales que fui durante mi pubertad. Tal vez desde los doce años cuando era un fanático a rabiar de la programación de Telehit, Mtv y demás franjas musicales de otros canales, esta tarde he decidido revivir ese periodo de mi vida. Me la he pasado desde las 3 p.m. postrado en esta cama mientras paso mi recuperación y no he podido cambiar el canal. Video musicales que me trasladan algunos años atrás cuando los vi por primera vez y en estreno exclusivo, al tiempo en que suenan otros que son más viejos, pero que me generan la misma nostalgia que cuando los escuchaba en mi adolescencia. Voto a veces por volver a las raíces. El viernes me quitarán los endemoniados tapones nasales y podré salir a la calle para distraerme por fin del esclavizante televisor, y en mi recuerdos quedará la última vez que tuve la costumbre audiovisual de escuchar música.